1.1.HIDROGRAFÍA

Francia reparte sus aguas entre los mares Atlántico y Mediterráneo. La divisoria entre ambas vertientes es el macizo Central francés. Los ríos atlánticos son los que drenan la mayor parte del país.

Los principales ríos son Loira, Garona, Dordoña, que desembocan en el golfo de Vizcaya, el Sena que desemboca en el canal de la Mancha, y el Ródano, con su afluente el Saona que desemboca en el Mediterráneo. Mención aparte merece el Rin, que durante un tramo hace frontera con Alemania, y sus afluentes Mosa, Mosela y Escalda.

En Francia no abundan los grandes lagos, pero son multitud los pequeños lagos de origen glaciar y las lagunas de tipo marisma en las tierras bajas del oeste. El lago más grande es el Lemán, que comparte con Suiza. Tiene una superficie de 582,4 km². Su principal afluente es el Ródano, y también ese es el río emisor. En su orillas están las ciudades de Ginebra, Lausana, Montreux del lado suizo, y Thonon Les Bains, Yvoire y Évian-les-Bains del lado francés.

1.2.CLIMA

En cuanto al clima, aunque Francia forma parte de la zona templada, con calores en verano. La influencia del Mediterráneo se manifiesta por inviernos suaves y cortos y por veranos tórridos.

Disfrutan de un verano moderado sin calores excesivos, que contrasta con los veranos cálidos.

En invierno las temperaturas disminuyeron de O. a E., lo que traduce la influencia de las masas oceánicas; en las regiones más continentales el frío es fuerte y persistente.